Pintura a témpera acuarelada sobre tabla, con intervención de blanco de plomo. Escuela inglesa, segunda mitad del siglo XIX.
Medidas: tabla de 70x57 cm con marco dorado, coetáneo.
En las obras de Palmer, tenemos paisajes con grandes aperturas perspectivas, donde el cielo se confunde con la naturaleza, y rara vez hay personajes presentes, todo se concentra en altísimos árboles y grandes espacios, donde en el cielo priman capas de nubes que plasman una sensación de infinito.