Carlo Bugatti (Milán 1856-Molsheim 1940), Mueble Librería, 1885 circa.
Madera, peltre, hueso y cobre repujado.
214x100x45 cm
El elaborado mueble, de aspecto bastante singular, representa a la perfección el estilo ecléctico del mobiliario firmado por Carlo Bugatti. Compuesto aparentemente por dos piezas, el mueble ha sido realizado en maderas policromadas e incrustaciones de hueso dispuestas en motivos geométricos. Las dos vigas laterales presentan una decoración en peltre que recuerda a los ideogramas japoneses, alternada con figuras de insectos estilizados. Las columnas de la parte inferior están recubiertas por múltiples bandas de cobre, trabajadas con la técnica del repujado en motivos florales. En la parte superior del mueble, preside un gran rosetón de cobre repujado que funciona como puerta para un hueco interior, también decorado con columnas de madera. Estilísticamente afín al grupo de muebles creado por Bugatti como regalo de bodas para el matrimonio de su hermana Luigia, como se desprende de las páginas ilustradas del volumen Carlo, Rembrandt, Ettore, Jean Bugatti editado por Philippe Dejean.
BIOGRAFÍA
Carlo Bugatti nace en Milán en 1856; su padre Giovanni, un hombre ecléctico con intereses que van desde la ciencia, la arquitectura y la escultura, le imparte la primera educación artística. En 1875 se inscribe en la Academia de Brera, donde conoce al futuro pintor Giovanni Segantini; se inscribe en la Escuela de ornato seguida por el docente Claudio Bernacchi, para después perfeccionarse en la École des Beaux Arts de París durante el período de formación del célebre orfebre René Lalique. Bugatti inicia su trayectoria como artista como arquitecto, diseñando edificios de gusto exótico, para luego orientarse en los años 80 del siglo XIX cada vez más hacia la proyección y creación de muebles originales a los que añade el uso de materiales extravagantes y sui generis. El ebanista y diseñador es hijo de una época marcada por la revalorización de la Edad Media, de la que nacen movimientos como el neogótico de John Ruskin y el Arts and Crafts de William Morris y a la que se añade un marcado interés hacia el arte oriental, convirtiéndose en anticipador del estilo Liberty en Italia. Las obras de Bugatti presentan, desde los albores, una combinación de motivos florales, pero también insectos, referencias al arte japonés e islámico; los materiales elegidos son una vastedad de maderas destinadas a crear policromías pero también el uso de incrustaciones de peltre, marfil, hueso, metales como bronce, latón y sobre todo cobre, a menudo trabajados con la técnica del repujado y para terminar, el pergamino: el artista había inventado de hecho un pegamento extremadamente resistente capaz de aumentar la durabilidad de los objetos.
La primera obra de Bugatti de la que conservamos documentación escrita es la habitación proyectada para su hermana Luigia, que en 1880 se casa con el ya citado Segantini. El mismo año, Carlo Bugatti se casa con Teresa Lorioli, con la que tendrá tres hijos: Deanice, Ettore y Rembrandt.
En 1888 participa en la Exposición de Earls Court de Londres, donde presenta entre sus creaciones un biombo de gusto ecléctico, particularmente apreciado por la crítica inglesa, como demuestra su presencia en la revista The Journal of Decorative Art. A partir de 1890, Bugatti crea sus modelos más conocidos, entre ellos las sillas de madera y pergamino con respaldo inclinado, los escritorios con ornamentos de cobre repujado, los canapés de tres plazas, pero también escritorios, armarios y camas. En 1900 participa en la Exposition International de París, cosechando grandes éxitos, para después exponer su Stanza-Chiocciola, singular invento que imitaba en los exteriores e interiores la concha de los gasterópodos, en Turín en 1902. El mismo año, el arquitecto musulmán Antoine Losciac le encarga una serie de muebles destinados a la casa de la madre del jedive de Egipto Abbas Helmy II.
Precisamente en la cima de su carrera, Bugatti cede al ebanista De Vecchi, su colaborador, su fábrica de muebles de Milán para trasladarse a París. Aquí se dedica a la realización de pequeños objetos de decoración y orfebrería en plata y cobre trabajados a cincel; las obras de este período, caracterizadas por una marcada influencia del Art Deco, están frecuentemente decoradas con curvas sinuosas, referencias florales así como con el repertorio de libélulas estilizadas, a las que implementa figuras de ranas, máscaras y palmetas. Junto con las obras del talentoso hijo Rembrandt, que mientras tanto se ha formado como escultor (célebres y buscadas sus esculturas de animales), los objetos de Bugatti son expuestos, vendidos pero también reproducidos por Adrien Hebrard, fundador de la fundición homónima.
En 1910, a consecuencia de la salud delicada de su esposa Teresa, Bugatti deja París para trasladarse a Pierrefonds, ciudad de la que se convierte en alcalde, comenzando a dedicarse a la pintura y a la escultura; los años siguientes la vida de Bugatti está marcada por una sucesión de desgracias, primero entre todos el suicidio de su hijo Rembrandt, que se quitó la vida con solo 32 años por problemas económicos, luego la muerte de su hija Deanice en 1932 y la de su esposa tres años después. Se traslada entonces a Molsheim, en Alsacia, donde desde 1909 su hijo Ettore dirige su famosísima empresa de automóviles, la Bugatti. En 1939, asiste al accidente mortal de su nieto, Gianoberto Bugatti, llamado "Jean", primogénito de Ettore, fallecido durante la prueba de un modelo de carreras de la empresa. Muere en abril de 1940, poco antes de la invasión alemana; está enterrado en el cementerio de Dettwiller.